Audio: La adoración, la luz y la respuesta de Dios

 AYUDAME A SALVAR UNA VIDA 

 


 

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

Epifanía significa, manifestación, aparición o revelación, se asigna este término a la fiesta que celebra la Iglesia Católica en conmemoración de la adoración de los Reyes Magos, acontecimiento que, por cierto, hoy celebramos.

La fiesta de hoy, prolongación de la Navidad, tiene en nuestra liturgia como protagonistas a unos magos de tierras extrañas que vienen a adorar al Mesías. Celebramos, en el Niño nacido de María, la manifestación de aquel que es el Hijo de Dios, el Mesías de los judíos y la luz de las naciones.

Así como los reyes magos se dejaron guiar por la luz de aquella estrella, nosotros nos debemos dejar conducir también por esa luz que brilla en nuestro interior indicándonos la importancia de adorar y celebrar con gozo al niño Jesús, y esto, porque el nacimiento de Jesús en Belén es Buena Noticia para todo el universo.

Como vemos en el evangelio, no son sólo unos pocos vecinos los que están al tanto del acontecimiento, desde oriente han llegado algunos para adorar al Niño. Es una forma de cumplimiento de lo anunciado por Isaías 60. Con un lenguaje muy poético, el profeta Isaías anuncia la alegría de la salvación, la vuelta de los desterrados, una salvación universal centrada en Jerusalén, sobre la cual brilla una luz. El profeta, lleno de entusiasmo, anuncia cómo vendrán desde las regiones más lejanas a ofrecer sus regalos a Jerusalén, preparando así el acontecimiento de los magos que vienen a adorar al Niño.

Por eso el salmo 71 insiste en que todos los reyes de la tierra se postren ante el Señor: “Se postrarán ante ti, Señor, todos los reyes de la tierra” y habla de los que vendrán desde lejos -Tarsis, Saba, Arabia- a ofrecer sus dones al «rey», que nosotros vemos como figura del Mesías, que hoy recibe estos regalos de los magos que vienen de lejos.

San Pablo en su carta a los efesios, insiste en que todos los hombres y mujeres de la tierra somos herederos de la misma salvación, nos manifiesta la universalidad de la salvación que el niño recién nacido trae para el hombre; no solo para el pueblo judío, sino también para nosotros.

Todo esto lo vemos en el evangelio de San Mateo 2, cuando nos cuenta el episodio de los Reyes Magos que vienen a visitar al recién nacido Mesías. Esos personajes que vienen desde lejos, obedientes a una intuición misteriosa, llegan hasta Jesús, lo reconocen como el enviado de Dios y «cayendo de rodillas, lo adoran», trayéndoles regalos: oro, incienso y mirra.

Víctor Martínez piensa que es hoy un gran día para entender de una vez por todas que Dios quiere de nosotros que, aprendamos a adorarlo, a postrarnos en el piso ante Él, con un gesto humilde, con la luz encendida, pues las velas influyen positivamente en nuestro bienestar emocional y espiritual, nos hacen sentir seguros y acogedores, convirtiéndose en una luz relajante, generando y transportando las ondas de la luz, con incienso, ya que no es tan fácil conseguir mirra, como en las ceremonias religiosas, para impregnar nuestros hogares del olor armonioso, divino, que nos dispone a meditar y concentrarnos en la oración, es esta una ofrenda a Dios y una forma de atraer bendiciones y protección divina.

Por último, el oro, que representa que para Dios todo lo mejor, nuestras riquezas nos la dan Dios y así mismo debemos ofrendarlas a Dios, el oro representa la gloria, la majestad, la pureza, la perfección, el valor, la sabiduría, el conocimiento, la naturaleza inmutable y la soberanía de Dios, es aquí donde entra el juego, el amor al prójimo, ejerciendo la caridad y ofreciéndola a Dios para glorificarlo.

Dios siempre contestará nuestras oraciones, pero hay que aprender a postrarse ante Él con humildad, a crear el ambiente adecuado para la oración profunda y a ser más caritativos con las cosas de Dios.
Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestra hermana Matilde Farach.

Hasta la próxima.

La entrada Audio: La adoración, la luz y la respuesta de Dios se publicó primero en Relámpago Informativo.

Fuente:

relampagoinformativo.net

Post Comment